La Guelaguetza ¿la mayor fiesta de los Oaxaqueños?
Por: Moises Lascurain.
Actualmente La Guelaguetza tuvo una difusión impresionante como nunca se había visto pues después de ser cancelada por dos años de pandemia, regresó, pero lo que conocemos como lunes del cerro, como la máxima fiesta de todos los oaxaqueños ya no es de los oaxaqueños, es una manifestación teatralizada simplificada y mercantilizada con rasgos culturales que sólo muestran la parte más atractiva para no aburrir al turismo.
En los últimos años la gente ha estado viviendo con la ideología de que el lunes del cerro es la máxima fiesta para los oaxaqueños cuando actualmente ya no podemos entrar a ella, tan solo en los primeros días de julio no quedaba ningún boleto para México, pero que tal para las páginas extranjeras, de hecho los boletos sobrepasaba los 7000 pesos y actualmente existen múltiples demandas porque llegaron a estar hasta en 30000 pesos.
Lo peor de todo es que se lucra con grupos indígenas durante sólo un mes para que el resto del año sigan siendo violentados o incluso invisibilizados es imposible poder adquirir boletos de más de 30000 pesos para un espectáculo que se supone que es nuestro. Tenemos que comenzar a entender y aceptar que lo que conocemos como lunes del cerro como la máxima fiesta de todos los oaxaqueños ya no es nuestra fiesta y que se está lucrando con grupos indígenas por intereses económicos.
Cuando las delegaciones llegan a presentarse en el lunes del cerro lo hacen primeramente en su lengua materna y después en español cuando realmente la ciudad sólo les aceptan hablar castellano, así es como La Guelaguetza reproduce la idea romántica y bastante alejada de lo que realmente viven las comunidades indígenas. Con el paso de los años se han alterado tradiciones, trajes o incluso costumbres con la única finalidad de ser más atractivos para el turismo, existen más de 3 demandas de grupos que han sido excluidos de La Guelaguetza sólo porque no son lo suficientemente auténticos o mejor dicho llamativos para el turismo.
Tampoco debemos de negar que el turismo es una gran fuente de ingresos para Oaxaca pero no para los oaxaqueños, es momento de aceptar que el lunes del cerro ya no es la máxima fiesta de los oaxaqueños y que sin darse cuenta se ha estado lucrando por años con los grupos étnicos para beneficios económicos para las élites políticas y al no tener la oportunidad de poder entrar al lunes del cerro se han estado creando las Guelaguetza populares, una Guelaguetza que si es del pueblo.
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